Como consecuencia del estado excepcional que estamos viviendo, muchos alumnos y alumnas de Castilla y León se han visto afectados por un último trimestre escolar atípico, donde las clases presenciales se han visto sustituidas por clases online o videos explicativos. Muchos estudiantes acusan de manera excepcional esta situación lo que ha provocado carencias educativas y grandes dificultades para la adquisición de conocimientos mínimos exigibles en los planes curriculares para abordar con éxito el curso que viene. Y ahí entra la importantísima labor que se realiza desde las academias de enseñanza.
Según ha ido avanzando el desconfinamiento, son muchos los expertos que se muestran muy preocupados por las grandes desigualdades educativas provocadas por la pandemia. El confinamiento nos ha obligado a todos a hacer un gran esfuerzo de adaptación: a padres, madres, alumnos y docentes. Si a esto añadimos otro periodo largo de desconexión del aprendizaje, como son los meses de verano, nos encontraremos en septiembre aulas con un grave deterioro de las habilidades cognitivas, sobre todo entre las familias con problemas económicos.
Por ello, nuestra asociación quiere impulsar la propuesta de un cheque formativo para los alumnos castellano-leoneses. Dicho cheque serviría para que los alumnos y alumnas de aquellas familias que más lo necesiten puedan recuperar durante los meses de verano su nivel académico en las asignaturas requeridas. Entendemos que la brecha digital ha supuesto una merma significativa en el proceso de aprendizaje y somos conscientes de la preocupación por parte de las familias.
